Soy Francisco Guayasamín. Me enrole con movimientos gay en Ecuador en 1998 realizando varias actividades empezando como defensor de los derechos humanos de personas sexualmente diversas y tengo el gusto de ser uno de los pioneros en promover el turismo gay en Ecuador, como ser también uno de los primeros hombres gay en dar la cara públicamente.
Estudie turismo cuando en Ecuador la carrera no existía profesionalmente. Solamente era una carrera técnica. En esos tiempos ser gay era penalizado, prácticamente nos trataban como si fuésemos delincuentes, por lo tanto, emprender un proyecto para promover el turismo gay hacia nuestro país, era una locura.
Al inicio fue muy duro para mí, ya que como gay visible recibí en la calle muchos insultos y a mi teléfono llegaron varias amenazas de muerte por parte de personas pertenecientes a grupos conservadores del país que se presentan ante el público como defensoras de la moral cristiana, pero tras bastidores mantenían una doble moral, sobre todo en el aspecto sexual. Costumbre que hasta los momentos actuales no ha cambiado.
También para dar a conocer sobre este nuevo tipo de turismo en Ecuador había que abrirse campo explicando a dueños de negocios de índole turística sobre lo que era la diversidad sexual, especialmente al personal de los hoteles con quien trataba enseñarles cómo tratar con personas gay.
Algunos dueños de negocios fueron muy renuentes, varios de ellos me dijeron en la cara – A mí no me gusta trabajar con maricones o el clásico - Detesto a los homosexuales, ellos viven en pecado. Dios los odia. - Pero luego viendo la calidad humana y el respeto que la gente gay tienen al llegar a cualquier lugar de estos, la situación cambio. Pasando el tiempo, me llamaban poniendo a su disposición sus negocios para que yo les lleve clientela gay. No solo eran hoteles, eran restaurantes, vendedores de artesanías, regalos, flores, chocolates, museos, y hasta médicos especializados, me invitaban a sus negocios, y estaban muy dispuestos a tratar con personas GLBT.
(En la actualidad varios hoteleros me afirman que prefieren tratar con hombres gay que con hombres heterosexuales. Me dicen que son más respetuosos, sobre todo ordenados y limpios).
Cuando empecé en 1998 como activista gay, las siglas LGBT no existían. Incluso en nuestra comunidad había mucha fobia hacia las personas trans. Para el año 2000 creamos la primer guía G&L del Ecuador, en la cual conocí a la primera agencia de viajes gay en el país. La empresa era manejada por una pareja en la cual uno de los dueños era ecuatoriano y el otro dueño era de Estados Unidos.
Fui a proponerles que contraten publicidad con nuestra guía, que apenas en ese entonces era un tríptico, y ellos andaban buscando personal. Luego presente mi hoja de vida. Tuve suerte, fui aceptado porque mi carpeta era la única que un hombre gay admitía su orientación sexual. La mayoría de las hojas de vida eran de hombres heterosexuales.
Mi jefe que era de New Jersey me enseñó como en Estados Unidos funcionaba la comunidad gay. Me escogió porque me dijo – Nosotros entre gais nos ayudamos.
Al trabajar con ellos conocí lo desarrollado que estaba el turismo gay en otros países.
Como recién en Ecuador se había despenalizado la homosexualidad era muy duro dar la cara como homosexual en esos tiempos. Mi jefe ecuatoriano jamás dio la cara como gay por temor a represalias. En publicidad en el extranjero la agencia se promocionaba como gay, pero en Ecuador era una agencia que podríamos llamar de “clientela normal”. Incluso teníamos mucho recelo el poner la bandera gay en el balcón del local para atraer a turistas gay que pasaban por la calle. Había el miedo a que algún heterosexual que conociera el significado y sea homofóbico se acerque a la agencia para atacarnos.
En esos momentos la mayoría de gente en Ecuador no conocía la bandera gay mas bien conocía la bandera del movimiento indígena Pachakutik que tiene los 7 colores del arco iris. Eso nos dio valor a instalar la bandera en el balcón de la oficina.
En una marcha del movimiento Pachakutic que pasó frente a nuestra oficina, empezaron a aplaudirnos y a gritar fervorosamente - ¡Gracias por apoyarnos! - Aunque chistoso para nosotros, ese hecho también fue histórico, fue la primera vez que la bandera gay ondeaba en Ecuador.
Debido a que los turistas gais que venían por medio de la agencia recibían trato con personas heterosexuales, en los cuales hasta el guía de turistas no era gay, tan solo el contacto con personal gay lo tenían por medio del internet. Me di cuenta ciertas carencias y en base a esta experiencia decidí crear mi propio emprendimiento, ser el primer guía de turismo gay personalizado en Ecuador.
En el año 2003 empecé este proyecto promocionándome en internet.
Mi principal idea dar un trato humanizado al turista, ya que muchos dueños de negocios gay tan solo veían a los gais como un gran negocio, mas no dando un buen trato.
Mi propósito principal era que mi turista tenga una experiencia real sobre lo que ofrece la vida cotidiana en Ecuador. No quería presentarles un Ecuador maquillado como lo presentan en la mayoría de los casos los tours programados por grandes agencias de viaje. Creo que dar a conocer el Ecuador real ha sido gran parte de mi éxito.
Reconociendo que cada persona tiene gustos diferentes, desde el primer contacto con el turista, trato de conocer sobre qué actividades le gusta hacer de esa manera le propongo un tour sumamente personalizado para él. Esa ha sido otra parte fundamental de mi trabajo. Cada tour que hago es creado especialmente para el turista, la pareja o grupo que venga, basado en sus gustos y curiosidades.
Desde que empecé, he tratado con cientos de personas gay de todo el mundo. La mayoría de ellos les ha gustado esta experiencia, que una vez que han regresado a sus países han recomendado a sus amigos que conozcan el Ecuador y me contraten como como su guía.
Habiendo superado los tiempos de pandemia en la cual muchos hemos tenido que enfrentar momentos difíciles, estoy muy contentos de que nuevamente varios turistas gais están interesados en conocer en Ecuador utilizando mis servicios.
Debido a la preparación que he tenido tanto en turismo y como activista GLBT orgullosamente mi slogan dice “Nadie conoce mejor la diversidad de Ecuador como yo”
Lo divertido de mi trabajo es que la mayoría de los turistas extranjeros que me contrata lo hace porque sabe que soy guía de turismo y quiere conocer el Ecuador, mientras que la mayoría de los ecuatorianos que me llama cree que turismo gay es “trabajo sexual”.
Ahora que estamos viendo con esperanzas sobre un mejor futuro para la población gay en varias partes del mundo, si ustedes vienen al Ecuador será un gusto guiarlos y hacerles conocer mi país. Les estaré esperando….
FRANCISCO GUAYASAMIN
http://ecuagaytourguide.blogspot.com